El pueblo según las Pinturas negras de Goya
España es un estercolero. Dicen que desde la sede de los principales partidos se reparte estiercol en billetes de 500 € metidos en sobres o en lo que sea, que no será por envoltorios. Está documentado que el extesorero del PP tenía cuentas en Suiza mientras era avalado por los últimos presidentes del partido, incluso le mantuvieron despacho, cobertura legal y hasta chófer hasta hace cuatro días... Ahora es un apestado -¿cabeza de turco?- y lo han dejado a su suerte mientras él promete ventilar la mierda; aunque quien va a ventilar tanto hedor es Mariano Rajoy mediante una auditoría interna y otra externa supervisada por un interno. ¿Desde cuándo la contabilidad B deja rastros? ¿Quiénes entre los recipendiarios de sobrecitos entre los principales del partido se van a prestar a comentarlo? ¿Desde cuándo los cómplices fiscalizan a los acusados?
España siempre se ha narrado con el realismo de estercolero desde los tiempos de la picaresca, cuando éramos la primera potencia mundial, también cuando empezábamos a perder el imperio (Quevedo), tras perderlo del todo (Valle-Inclán), durante la profunda crisis de los treinta (astracanada, absurdo) y durante el franquismo (La Codorniz)... Ahora la realidad politica vuelve a esperpentizarse, precisamente cuando nos gobierna el presidente que dice guiarse por el "sentido común" y la "sensatez". Pero ya se sabe que la sensatez ibérica es el sinsentido. Absurdo y estercolero, dos constantes a las que nuestra Historia tiende después de perseguir espectros más o menos quijotescos. Rajoy se mueve bien en los estercoleros, deja pudrir los problemas y luego ventila el hedor... Solo que ahora la putrefacción se ha metido en su sede genovesa y parece invadirlo todo (hasta el apaleado partido socialista ha aportado su peculiar versión de culebrón putrefacto en la Fundación Ideas...). La gente, lo dicen las encuestas, ya se toman las solemnes declaraciones anticorrupción de los políticos como una astracanada más; estiercol mediático para tapar la mierda. Pero es que el gobierno se ha empeñado en un más difícil del proceso de "esperpentización"; ahora anuncian que educarán a los niños contra el fraude fiscal... Ya se sabe, la derecha, siempre tan moralista, echa tierra sobre el presente pero salvaguarda los valores hacia el futuro...
España es un estercolero pero está en manos de una avestruz especialista en salvaguardar la mierda, aventarla, esconderla , licuarla, gasificarla... Menos mal.
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