El colmo del sinsentido de nuestro régimen ha vuelto a manifestarse en tierras gallegas. Resulta que el Valedor do Pobo (Defensor del pueblo gallego) se ha manifestado a favor de los tremendos recortes del Gobierno de Rajoy. La oposición se le ha echado encima a Benigno López, convirtiéndolo en el Maligno y forzando su dimisión. ¿Para qué queremos un defensor del pueblo que aplaude los tormentos ocasionados a ese pueblo? Pero el bueno de Don Benigno no ha hecho sino poner en evidencia la pantomima de un sistema que reparte cargos a cambio de fidelidad. Este es el pan nuestro de cada día de los políticos integrados en los partidos, solo que al Valedor do pobo se le presuponía cierta independencia. No ha guardado las formas y ahí le han pillado...
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